Cuando conoce a su hermana pequeña, Yo Minana, por primera vez en mucho tiempo, parece completamente marimacho y poco atractiva. Un día, un mes después de volver a casa, sus padres están trabajando en el turno de noche y no volverán a casa hasta por la mañana. Toshiya, encargado de todas las tareas domésticas, no puede evitar una sensación de anhelo al ver el aspecto indefenso de su hermana. Manoseó los pechos transparentes y sudorosos de su hermana, jugando con sus pezones y chupándolos. Su hermana también frotó sus pezones contra la polla de su hermano y empezó a retorcerse. Fueron al baño, todavía deseándose...