Un día, mi mujer me invitó a la peluquería de su amiga Momose. Los pechos de Momose eran más grandes de lo que hubiera imaginado, con grandes H, I y J. ...... Cada vez que veía a Momose, me quedaba mirando sus pechos. Me excitaba y me avergonzaba a la vez que me tratara Momose ...... Me tumbé en la camilla. A Momose también le excitaba ver las erecciones de sus clientes masculinos, así que...