"Hermano, ¿qué estás haciendo ......" "No ...... soy tu hermana ......" "...... hmmm Me tiemblan los pezones." "Si te contienes, te volverás loca ......" La tímida Shizuka no pudo emitir sonido alguno y se limitó a fingir estar dormida, retorciendo su cuerpo de dolor. Aunque no quería decirlo, su cuerpo era sincero: "Mi cuerpo resbaladizo te dirá que lo siento..." "¡Ahh! Tu pene está entrando!" Efectivamente, ella se despertó y se detuvo...