El amor de Miyuki (Masuo) por su hijo Keita es conmovedor. Aunque Keita ha crecido, siguen bañándose juntos. Un día, Miyuki entra en la habitación de Keita y éste, que está leyendo un libro pornográfico, corre a esconderse. "Es demasiado mayor para eso", le dice Miyuki. dijo Miyuki, pero Keita la empujó. Sus sentimientos por Miyuki superan a los de su madre. Keita desata torpemente su deseo largamente reprimido...